domingo, 12 de enero de 2014

Abuso sexual: catástrofe del silencio

Ocurre en todas las esferas y estratos sociales.


El abuso sexual en los niños es uno de los actos más detestable y monstruoso que se puede cometer con un ser humano, especialmente en los niños. Esto ocurre en todas las esferas y estratos sociales. Los niños dependen de sus progenitores o esa figura adulta encargada de nutrirlos de forma emocional, física, espiritual y psicológica.

Cuando ocurre el abuso sexual dentro del núcleo familiar y se rompe esa confianza, se convierte en una especie de traición hacia el niño. Es decir, que se viola el código de protección. Una vez ocurrido el acto, esa herida se perpetúa a través de todas sus etapas, inclusive en la adultez. 
Es triste saber que en un hogar en Puerto Rico ocurre el abuso sexual y, lo peor de todo, guardar silencio dentro de las familias por razones que no se justifican, por ejemplo, una madre tiene conocimiento que su esposo ha abusado de su hija, pero la dependencia emocional y económica con su esposo no le permite parar ese abominable acto. Uno realiza el acto y otro es cómplice.

Definición de abuso sexual

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (Centers for Disease Control Prevention, CDC) define abuso sexual como "hacer partícipe a un niño en un acto sexual que incluye comportamientos como acariciar indebidamente, penetración y exponer a un niño a otras actividades sexuales." Hay escasez de datos de la cantidad de menores abusados sexualmente porque los mismos no se informan y no existe una definición universal. En Puerto Rico, la ley 246 del 16 de diciembre de 2011,  conocida como la “Ley para la Seguridad, Bienestar y Protección de Menores”, posee una definición de lo que se considera abuso sexual: "incurrir en conducta sexual en presencia de un menor y/o que se utilice a un menor, voluntaria o involuntariamente, para ejecutar conducta sexual dirigida a satisfacer la lascivia o cualquier acto". 
El delito puede ser a través de "agresión sexual, actos lascivos, comercio de personas para actos sexuales, exposiciones obscenas, proposición obscena, producción de pornografía infantil, posesión y distribución de pornografía infantil, utilización de un menor para pornografía infantil, envío, transportación, venta, distribución, publicación, exhibición o posesión de material obsceno y espectáculos obscenos, según han sido tipificados en el Código Penal de Puerto Rico” (Definición de Lex Juris). En estos momentos se están realizando esfuerzos en la legislatura para incluir la trata humana en la Ley 246. 

Algunos datos estadísticos

Los CDC estiman que 1 de cada 6 varones y 1 de cada 4 niñas serán abusados sexualmente antes de los 18 años. Estos datos también se publicaron en el periódico de Primera Hora. La Asociación Psicológica Americana indica que la mayoría de los niños abusados son por un adulto que ellos confían y conocen. Esto corresponde a un 60 % de adultos que comete el acto delictivo y no son miembros de la familia. Se mencionan, por ejemplo, amigos de la familia, cuidadores o niñera, vecinos y otros. El 30 % pertenecen a algún miembro familiar como los padres, hermanos, tíos y primos. Un 10 % incluye personas desconocidas por el menor.
El Centro Nacional para Víctimas de Crimen destaca que el abuso sexual no se limita a solamente contacto físico, el mismo puede ser exposición, voyeurismo y pornografía infantil. Para aclarar a los lectores, el DSM-5 (2013) define voyeurismo como "observación de una persona desnuda o que se está desnudando o cometiendo acto sexual" con el propósito de obtener excitación sexual.

Algunas características manifestadas por un niño abusado sexualmente

Las características que se presentan a continuación dependen del tipo de abuso sexual.  Las mismas son una guía para que los padres,  familiares y maestros observen con sumo cuidado la conducta del niño.  Las mismas incluyen área emocional, física y cognitiva/académica.  Entre ellas se mencionan:
* Cambios repentinos de conducta, por ejemplo se aísla de sus amiguitos y pares
* Conducta hostil y desafiante con los adultos
* No desea participar de actividades que antes disfrutaba
* Síntomas depresivos y niveles altos de ansiedad
* Intento suicida
* Inseguridad y pérdida de confianza en sí mismo
* Se come las uñas
* Enuresis y encopresis (eliminación de orina  o heces fecales)
* Dificultad en dormir, pesadillas recurrentes.
* Secreciones vaginales y del pene, y enfermedades de transmisión sexual
* Se toca los genitales o se masturba
* Se ausenta en la escuela
* Dificultad con las materias escolares, concentración y expresión verbal pobre
* Desconfían de los adultos
* Limitación en las destrezas sociales

¿Qué pueden hacer los padres o familiares?

Es importante realizarle al niño un examen físico completo con el pediatra o médico de la familia. También buscar ayuda psicológica con un especialista en abuso sexual y trauma. Una vez se tiene un historial y se identifica que el niño ha sido agredido de forma sexual se debe crear un ambiente de seguridad en el hogar sin juzgar ni cuestionar a cada momento al niño. Debemos evitar que el niño se sienta culpable por lo sucedido. Respeta el espacio y evita abrazar al niño. Debido a que su cuerpo ha sido invadido, abrazarlo puede ocasionarle estrés. En general, si sospechas que existe abuso sexual, no seas cómplice e informa a los profesionales o agencias pertinentes, como el trabajador social, los maestros, el Departamento de la Familia y otros. Recuerda que el maltrato es responsabilidad de todos.