lunes, 22 de junio de 2009

GROOMING


Grooming se denomina a la «estrategia» utilizada por abusadores sexuales para manipular a niños, niñas y adolescentes así como a los adultos de su entorno encargados de su cuidado, para poder tener el control total sobre la víctima en el momento de la situación de abuso.
Se trata de un proceso en el que el abusador vence la resistencia del niño, niña o adolescente mediante una secuencia de acciones de manipulación psicológica.
También se utiliza esta estrategia para silenciarlos una vez que el abuso ha tenido lugar”.
“La generalización de internet –agregó– ha llevado a la aparición de distintos fenómenos y conductas, como que pueden dañar a nuestros niños.
Entendemos que es importante que estén preparados para protegerse frente a estos posibles riesgos; que aprendan las formas en que sus derechos pueden ser vulnerados y que conozcan las pautas saludables para interactuar en línea, así como también a discriminar los contenidos convenientes de los que no lo son”,.

Todo esto conlleva dificultades para la intervención y sanción ante este tipo de delitos. “Ha pasado en los juzgados que algunos dicen que sin penetración, no hay abuso. ¿Qué nos espera cuando vayamos con un caso que sea vía Messenger?”, se interrogó.
El problema está ligado a la existencia de una situación encubierta, producto de un proceso de manipulación, por el cual el menor no se siente violentado.

Sin embargo, todo ello apunta al fin perseguido por el adulto. “La víctima puede ser expuesta a material sexual inadecuado, ilegal, ofensivo o traumático (a través de imágenes pornográficas, videos, dibujos y animaciones, mensajes de texto, correos electrónicos, relatos, sonidos y música). O puede darse una situación de cíber-abuso sexual unidireccional o bidireccional, por medio de texto o imágenes.

Algunas de las acciones que se realizan como parte del proceso de grooming son punibles de acuerdo a la ley penal vigente. Por ejemplo, el envío por internet de fotos y videos de carácter pornográfico a un menor con el que se entabló un contacto por ese medio, y con el propósito de corromperlo, resulta constitutivo del delito de promoción de la corrupción de menores de edad.

LA PEDOFILIA ES SIGNO DE DECADENCIA MORAL


El famoso escritor británico Arthur Clarke,autor de 2001 "Odisea del Espacio" había relatado y reinvindicado, en una entrevista periodística, su costumbre de tener relaciones sexuales con chicos.Y estas declaraciones las hizo en un momento delicado pues el principe Carlos lo investiría como caballero.

Arthur Clarke,vive desde 1956 en Sri Lanka.Tiene una casa junto al mar que es una especie de oasis tecnológico.allí,en la ciudad de Colombo,el autor de "El fin de la infancia" dijo crudamente: " En cuanto llegan a la edad de la pubertad.. OK, no hace daño.Creo que lo que más lastima a los chicos-dijo-es el llorisqueo histérico de sus padres después.Si los chicos no se molestán ,está bien".

Sri Lanka es uno de los "paraísos"mundiales de la pedofilía.Y el sexo de los chicos es un negocio que mueve plata grande.Como dice el refrán, "el que tiene plata hace lo que quiere" con lo cual el dicho popular brinda,a quien tiene fortuna económica la posibilidad de elegir entre el bien y el mal.Destinar parte del dinero a hacer obras de beneficencia, de caridad y solidaridad o usar el dinero para satisfacer bajos instintos producto de la debilidad sexual con lo cual se contribuye a aumentar la corrupción en las costumbres sociales.Entre los cuales figuran estas "vacas sagradas"de la literatura que no tienen ningún empacho de proclamar su debilidad moral.

A los que usan el dinero para estos menesteres los denunció oportunamente la UNICEF,el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia que reveló que turistas y hombres de negocios de países ricos son los principales clientes del millón de niños asiáticos que ejercen la prostitución.

El abuso sexual de niños por parte de turistas extranjeros ha sido denunciado también en varios países sudamericanos,africanos ,Indonesia,Kenia ,la India.

El informe de la UNICEF da cuenta que la prostitución infantil en Asia se conc
entra en prostíbulos o en los deniminados salones de masajes donde muchos niños viven como "virtuales esclavos".¡Que nos deparará el futuro a los habitantes de la ciudad de Buenos Aires!,donde la legislatura porteña se apresta a aprobar la ley sobre contravenciones donde han sido eliminadas la prostitución,la ebriedad y la vagancia.Es decir, que de ser aprobadas estas contravenciones las prostitución no tendrá penas y si será una pena ver como serán prostituidas las personas por los inescrupulosos de siempre.

El informe de la UNICEF explica que hay muchos factores que alientan la prostitución infantil,entre ellos las penurias económicas.Y en esta era del turismo barato son cada vez más los viajeros de las naciones industriales que recurren a la prostitución infantil.Muchos ricos viajan a Asia para satisfacer sus bajos instintos y evitar el riesgo de ser descubiertos y encarcelados en sus países de origen o por creer que las relaciones con niños aleja el peligro del SIDA.

El informe de la UNICEF está basado en un estudio de la organización Pongámos Fin a la Prostitución Infantil en el Turísmo Asiático,dado a conocer en Tailandia.Esta entidad, que también debería crearse en la Argentina,dice que la prostitución infantil se desglosa en 300.000 niños en India; 100.000 en Tailandia; 100.000 en Taiwan; 100.000 en Filipinas; 40.OOO en Vietnam; 30.000 en Sri Lanka y miles en China.

Se estima que 150.000 niñas nepalesas de menos de 16 años,trabajan en prostíbulos y hasta 40.000 niños bengalíes son obligados a ejercer la prostitución en Paquistán.
Aun no se ha dado a conocer el trabajo encomendado por la UNICEF, a una universidad de Yakarta, para que determine cuántos niños de Indonesia se encuentran en "ciercunstancias difíciles", lo que comprende todos los aspectos del abuso sexual.Una vez completado el estudio tendremos un cuadro más preciso sobre cómo se obliga a trabajar a muchos niños,especialmente en este perverso oficio de la prostitución.

Por todo ello hacemos un llamado a la comunidad internacional para que se ponga fin a la violencia en la que viven los niños del mundo.Y pedimos un minuto de silencio por los niños que sufren y para aquellos que mueren o están a punto de morir en el mundo por la irracionalidad de los adultos.

ABUSO SEXUAL INFANTIL EN AMERICA LATINA



El abuso sexual infantil es una amenaza para niñas, niños y adolescentes en todo el mundo. En la mayoría de países de América Latina la violencia contra los niños se incrementa, mientras que el accionar de los gobiernos para prevenir, atender a las víctimas y sancionar a los agresores es insuficiente.

En este sentido, exhortamos a los administradores de justicia de América Latina y el mundo a anteponer el principio del interés superior del niño para asegurar la sanción a los responsables de los abusos sexuales. Asimismo, a la ciudadanía a mantenerse vigilante en la protección y promoción de lo más valioso que tenemos: nuestros niños, niñas y adolescentes.

Solamente en Nicaragua, la Policía Nacional, a través de la Comisaría de la Mujer, atendió el año pasado (2008) 3,797 denuncias de delitos sexuales; el 80% corresponde a los delitos de violación, estupro y abuso sexual infantil.

Sin embargo, esto pasa a formar parte de las estadísticas internacionales que indican que 150 millones de niñas y 73 millones de niños menores de 18 años tuvieron relaciones sexuales forzosas o sufrieron otras formas de violencia sexual con contacto físico (OMS).

Que cada hora 228 niños/as padecen de explotación sexual en América Latina y el Caribe. Dos terceras partes de las víctimas de abuso sexual son de sexo femenino. En la mitad de los casos los atacantes viven con las víctimas y son familiares directos. (Nils Kastberg, Director Regional de Unicef para América Latina y el Caribe)
Es alarmante el incremento progresivo de los casos de agresiones sexuales a niños y adolescentes. Un panorama incierto puesto que las estadísticas son aún subregistros que sólo dan una pincelada a la gravedad del problema.

Si tenemos en cuenta que la mayoría de casos no son denunciados, si incluimos las repercusiones del abuso sexual en las familias, nos damos cuenta que la tarea ciudadana es exigir que las autoridades en cada uno de los países busquen una respuesta inmediata que sancione a los responsables, atienda a las víctimas y establezca acciones preventivas permanentes.

En Nicaragua, las víctimas claman justicia, la ciudadanía sensibilizada y consciente del problema está indignada por la falta de respuestas y políticas que ataquen de raíz ésta pandemia por el contrario estamos siendo testigos de la invisibilización de este problema, que ubica en ventaja a los violadores sexuales de niños, niñas y adolescentes y en desventaja a las víctimas.

Víctimas y familiares que denuncian estos abusos ante las autoridades competentes, que a veces pasan más de ocho meses yendo y viniendo de la policía, los juzgados, la fiscalía y que aún esperan una sanción basada en las leyes.

Muchas de estas víctimas, han tenido que soportar contar una y otra vez cómo le sucedió el abuso, han sufrido humillaciones, reprogramaciones de sus casos, cansancio, hambre y a pesar de todo el dolor, también se enfrentan a la insensibilidad y complicidad de algunos administradores del sistema de justicia cuando emiten sus sentencias.

La mayoría de los ciudadanos desconocemos que nuestra legislación actual, contempla sanciones severas contra los abusadores sexuales, las penas privativas de libertad van desde los 12 hasta los 30 años de prisión. Es importante decir que este nuevo Código aprobado en 2008, incorpora nuevos delitos que sancionan otras formas de violencia sexual, como los delitos relacionados a la explotación sexual comercial.

Sin embargo, el problema no es la falta de leyes, sino, su aplicabilidad en los procesos judiciales, que faciliten a la víctimas restituir su derecho y acceder a la justicia, ya que muchos procesos judiciales terminan en una situación de impunidad. Dentro de este contexto radica la responsabilidad directa de los administradores de justicia, es decir, la Policía Nacional de Nicaragua, Ministerio Público y el Poder Judicial.

Invitamos a los administradores de justicia a ser más vigilantes, honestos y sensibles ante la problemática del abuso sexual, a evitar la revictimización en el sistema de justicia, a ser más capaces en cuanto a sus conocimientos en la aplicación de leyes desde un enfoque humano y con sensibilidad social que no permita la constante reprogramación de los juicios, el cansancio de la familia ante la necesidad de hacer prevalecer la justicia.

La verdad es que todos y todas debemos contribuir a la lucha contra el abuso sexual y está en las autoridades la responsabilidad de difundir estas leyes, no sólo a los adultos, sino también a niñas, niños y adolescentes a quienes es necesario informar sobre las sanciones para quienes atentan contra ellos y ellas y los factores de riesgo implicados tales como maltrato, abandono físico, material y afectivo, hacinamiento, bajo nivel educativo, relaciones de poder (adulto-niño / hombre-mujer) entre otros. Por tanto, es urgente aplicar programas de prevención desde el Estado y el cuidado en las familias que se enfrenta el abuso sexual infantil.


hablemosde.abusosexual@gmail.com
Movimiento contra el abuso sexual – Nicaragua