lunes, 13 de agosto de 2012

MUCHAS GRACIAS POR LAS 500,000 VISITAS.


Cuando años atrás empecé a publicar en un blog personal, no tenia mucha idea de lo que conseguiría e inclusive de lo que buscaba al publicar. 

Ya han pasado años desde aquel entonces, mucho e hablado en estos seis años sobre el abuso sexual infantil, más de ochocientas publicaciones en el blog. Orgullosamente mas de mil quinientas personas lo leen a diario en dos continentes y en mas de treinta países de habla hispana.

Hoy cumplimos Quinientas mil visitas para un blog que no habla de Deportes o Espectáculos, un blog que su tema principal es ayudar a informar sobre el peor delito de la humanidad, el abuso sexual infantil, con este blog tratamos de brindar un espacio de ayuda a aquellos que son sobrevivientes y un mecanismo de orientación para prevenir este flagelo.

Esto solo debe ser el principio, se necesita avanzar y ese avance se lograra con el interés de todos.

En estos años hemos podido participar en la aprobación de una iniciativa de ley en la capital de mi país México para evitar la revictimización  en los procesos de denuncia.Pero se necesita lograrlo en todos los demás Estados de la república.

Hemos podido canalizar a sobrevivientes adultos con otros sobrevivientes y psicólogos vía Internet con el objetivo de lograr su propia recuperación y a su vez ellos recuperados puedan ayudar a otros a encontrar el camino.

Hemos creado la red hispanoamericana contra el abuso sexual infantil a nivel mundial, en donde cada día somos mas. Hemos distribuido cientos de trípticos y póster para la prevención del abuso sexual infantil en eventos públicos.

Me niego a aceptar que todo este esfuerzo es en vano.
No lo es y creo firmemente que seguiremos avanzando.

Con una campaña mundial de prevención, "GRITOS SIN VOZ" con mas capacitación y trabajo conjunto y coordinado  con mas organizaciones y personas afines a combatir este delito.
Esto no lo e logrado solo, se lo debo a las personas con las que colaboro, todos ellos voluntarios y  comprometidos que día con día ayudan a tener un mundo mejor .

MUCHAS GRACIAS A TODOS USTEDES.




Miguel Adame Vázquez.
Ciudadano Mexicano y Padre de Familia.

500.000 voces buscaron el blog A.S.I. Nunca mas.


Si cada país del mundo tendrá una persona como Miguel Adame, tan dedicado a la educación sobre el crimen más silenciado que es el abuso sexual infantil y sus consecuencias en la vida adulta, el mundo será otro. 
Felicidades Miguel!

Felicidades también a todas las personas que entraron y entran a este blog, sea por buscar información, sea por haber encontrado un lugar para romper el silencio sea para cooperar con esta noble causa, sea para intercambiarse con otras personas sobrevivientes o en búsqueda de un apoyo especial, el blog A.S.I. Nunca mas! se ha hecho en poco tiempo un espacio virtual muy útil y muy buscado. Siento que en el mundo hispanohablante no hay nada comparable con este espacio.

Yo se que no es nada fácil para sobrevivientes, entrar al blog en búsqueda de desahogarse, pero es para muchas el único lugar donde encuentran "escucha" empática y donde encuentras otras con quien intercambiarse, para salir del aislamiento, para entender que no somos las culpables por lo que nos han echo en nuestra niñez. Los culpables son siempre las personas que abusan. Pero la mayoría de ellos no tienen la mínima consciencia del crimen que están cometiendo, abusando de un niño o de una niña. 

Siento que somos una familia cada día más grande, y estamos haciendo historia con esta forma de acercarnos y apoyarnos mutuamente y ampliamos el círculo de personas que ya no quieren quedarse calladas.

500.000 personas con una sola voz gritamos: basta ya al abuso sexual infantil y cada día somos más. 


Romper el silencio quiebra el poder de los abusadores. 

Adelante, Miguel y mis más cordiales felicidades por tu precioso labor.

Un abrazo desde Nicaragua
Brigitte Hauschild

Mientras más pierdo, más gano


Logrando lo extraordinario



Una de las razones por las que los sobrevivientes seguimos guardando silencio incluso muchos años después del abuso, es el miedo a perder a las personas que son importantes para nosotros. Pensamos: si lo digo, mi madre me va a odiar. Si lo digo, mi padre nunca me perdonará. Si lo digo, mi hermana no me volverá a dirigir la palabra. Si lo digo, mi tío nunca volverá a casa. Si lo digo, la abuela no querrá saber nada de mí. Mi madre se moriría, si yo lo digo. Mi hermano iría a prisión y no lo volvería a ver, si lo digo. Mi prima se alejaría de mí para siempre. Mi esposo me dejaría, si lo digo. La lista sería interminable si cada uno de ustedes da sus razones para no decirlo. La verdad es que es muy probable que al decirlo, las relaciones importantes a nuestro alrededor cambien para siempre y en muchos casos queden irremediablemente rotas.

Recuerdo haber leído en algún sitio: “Ninguna familia sobrevive a la revelación del secreto del incesto. Por lo general, sobreviene el divorcio y la desintegración de la familia”. Y pensé, mi madre nunca se divorciara. Seguramente lo que pasaría si lo dijera, es que me odiarán para siempre y no querrían verme jamás. Bueno, mi familia no sobrevivió a la revelación del incesto. Mis padres se divorciaron. Nosotros seguimos juntos aunque en los primeros años posteriores al divorcio, la relación de todos conmigo, no marchaba del todo bien y parecía fracturarse inevitablemente. Afortunadamente luego de una década de malabares familiares, sobrevivimos y seguimos unidos. Mi padre, en cambio, malvivió los últimos años de su vida.
Las pérdidas humanas ascendieron a un número mayor del que yo habría imaginado. La familia paterna en su totalidad se perdió. Primos, primas, tías, tíos, hasta el gato… todos ellos me consideraron demente, loca, traidora, malagradecida, débil. Cargué con toda la culpa según ellos y su código incestuoso de vida. Podemos sumar a las pérdidas humanas, todas las relaciones no familiares que intenté antes, durante y después del proceso de sanar, que ya sea que se alejaron de mí por “ser rara”, por hablar de temas inapropiados y totalmente desagradables (léase incesto), por mi incapacidad para elegir parejas sanas y luego (en consecuencia) por mi incapacidad para mantener una relación de pareja, por estar deprimida todo el tiempo, por estar enojada todo el tiempo; o bien que yo me alejé de ellas por no apoyarme en el proceso de sanación, por abusivas, por machistas, por tratar de controlarme, por no comprenderme, por no quererme, por traicionarme (hubo un tiempo que no estar de acuerdo conmigo, era considerado alta traición), por no pasar mis cuasi imposibles pruebas de lealtad…

El número de bajas ha sido enorme.

Sin embargo, al pasar de los años, llego a una conclusión: no perdí a nadie. No fueron pérdidas. ¿Cómo podría lamentarme por haber perdido al tío que me dijo “Mejor que perdiste tu virginidad con tu padre y no con un desconocido”? Sacar a alguien así de mi vida fue una ganancia. No quiero a un pervertido como él cerca de mis hijos, ni en las reuniones familiares. ¿Podría lamentarme por perder al novio que me presionaba para tener relaciones sexuales cuando yo no lo deseaba? Si no respetaba mis decisiones en aquellos tiempos no veo cómo hubiera llegado a respetarlas luego de 20 años de matrimonio. ¿Me lamento acaso de haber perdido al primo abogado que dijo que estaba tratando a mi padre como a un criminal y que la única culpa soy yo porque no pude mantener la boca cerrada? No, y me alegra saber cuáles son las convicciones de ese abogado para no recomendárselo a nadie que busque justicia. ¿Sería de lamentar haber perdido a la prima psicóloga infantil que dijo que soy una exagerada, que no es para tanto, que debería estar agradecida con mi padre por todo lo que me dio en lugar de echar al viejo a la calle y armar un escándalo?

Si reviso caso por caso me doy cuenta que cada una de esas personas era nociva para mí en alguna forma. Que duele cuando alguien de quien se espera compresión, afecto, apoyo… nos da la espalda. Sí, duele y duele mucho. Pero mientras más rápido se han ido estas personas de mi vida, ha sido menor el daño pues han pasado 14 años desde que dejé de guardar el secreto y han sido 14 años sin estas personas nocivas en mi vida. No quiero imaginar el impacto negativo que cada uno de ellos podría haber causado en 14 años. En cambio, me quedé con las personas que me ayudaron y me siguen ayudando, de una u otra manera, a ser un mejor ser humano cada día. Mi crecimiento personal ha sido enorme, me enorgullezco de ello. El abuso ya no es el tema de mi vida. Es un hecho fundamental, pero sólo eso, un hecho. He tenido grandes logros. He dado pasos firmes. Esas pérdidas, han sido mi ganancia pues esas personas sólo saben tirar hacia abajo y yo voy en franco ascenso.
A ellos, sólo queda decirles: háganse a un lado que tengo una vida para ser feliz.

CONY DIAZ

SE PUEDE Y SE DEBE HACER


Querido Miguel Adame:


Hoy llegamos a 500.000 visitantes de esta potente RED que trabaja sin recibir nada a cambio mas que INFORMAR acerca de todo lo que conlleva un ABUSO SEXUAL. Era hora de ROMPER EL SILENCIO de todos aquellos GRITOS SIN VOZ que claman justicia y lloran agonía.
Nuestra sociedad enferma, ensimismada en obtener cosas materiales a dejado de lado a lo más preciado que posee una sociedad, la humanidad, NUESTROS NIÑOS. Pequeños seres que buscan protección y amor de nosotros los adultos responsables.
Pero dentro de toda esta vorágine existen adultos que solo desean ver sus alas rotas y detener ese hermoso vuelo.
Hoy gracias a tu hermosa iniciativa, a tu valentía, conocimiento y creatividad has logrado cautivar esos corazones que buscan refugio en esta cárcel instaurada dentro de nosotros mismos, juegos de egoísmos, egos que revolotean, de discurso tras discurso las ansias de poder. Pero en tu corazón repleto de altruismo fuiste capaz de dar un gran espacio para ellos, NUESTROS NIÑOS y promover fuerzas a través de este conglomerado mundo y aunar alianzas y fuerzas, lograr botar todos los mitos, aprensiones y miedos de lo que significa realmente un abuso sexual.

Así es, INFORMARSE es un derecho de todos, para poder enfrentar la VERDAD, que debe primar sobretodo cuando de por medio existen vidas de inocentes que no pueden defenderse. Es obligación de cada país poner todos los esfuerzos en PREVENIR y por sobretodo REPARAR a los víctimas. Si no reparamos seguiremos enfermando aún mas esta sociedad.
Debemos ser capaces de reconocer que les hemos fallado a nuestros niños y de aquí en adelante sobreponernos y comenzar a trabajar unidos, en redes para que enfrentemos de la mejor manera este flagelo.

SE PUEDE Y SE DEBE HACER. Gracias por confiar en mi persona y gracias por creer en estos sueños que son de miles y miles y que juntos lograremos reavivar las mentes dormidas y prender nuestra creatividad para dar soluciones reales a esas pequeñas miradas que miran con desconsuelo la injusticia que día a día roba sus esperanzas.

Un abrazo desde CHILE, donde las mentes se están abriendo. Los corazones se están movilizando y el espíritu se está fortaleciendo para ROMPER LAS INJUSTICIAS A NUESTROS NIÑOS. Ellos son el motor de la sociedad, el futuro de la humanidad está en sus manos. VAMOS QUE SE PUEDE!!!!


Felicidades por las 500.000 visitas al Blog
Yamile Caba
CHILE

La responsabilidad de la sociedad.


Los niños son recibidos por la cultura con toda la potencialidad que se les ha otorgado con el solo hecho de existir. En las más románticas de las situaciones, un nuevo ser es recibido con el afecto positivo de su familia, los padres lo esperan con ansia y tienen todo preparado para él.

Los padres, cumplen con la función de ayudar a la formación de un Yo capaz de relacionarse de manera autónoma y eficaz, así como mantener un apego seguro con ellos, que les permita crear una autoestima lo más pleno posible, continuándolo acompañando en el proceso de su desarrollo como persona, fungiendo a su vez e implícitamente como un medio protector inmediato de los peligro de la vida actual. Las expectativas que se presentan del “cómo debe ser” esta relación padres e hijos, es truncada muchas veces, tendemos a colocar sobre nuestros hijos una idealización de lo que nosotros no fuimos. Cuando se presenta un conflicto, las responsabilidades no son aceptadas sin que la sombra de la culpa esté presente, no omito mencionar que nos referimos a la “responsabilidad” no solo como afrontar las consecuencias de los actos, sino como la “calidad de la respuesta” ante estos conflictos.

Para un niño, casi todo proveniente del medio introyectado como parte de sí mismo, y tanto los aspectos positivos como los negativos contribuyen a su estructura, ahora bien, cuando el niño ha sido perturbado en su sexualidad, se esperaría que las personas a su alrededor le otorgaran su apoyo y sobre todo, la seguridad y confianza que le han arrebatado con tan brutal hecho, solo los afectos positivos pueden aminorar los daños causados al menor. ¿Pero qué sucede si ocurre lo contrario? ¿Si por ignorancia de cuál sea la respuesta más conveniente ante estas situaciones se aumenta el efecto traumatizante del niño? ¿Qué ocurre si no se establece una base de contención y conexión empática con el infante? La primera reacción ante el descubrir, o el escuchar una confesión sobre un ASI determinará el manejo de la situación y sobre todo la recuperación de la víctima y sus familiares. Las secuelas que arrastran un ASI se pueden reducir, (en el caso de una intervención oportuna) eliminar (en caso de que esté manifestando en síntoma) o, mejor aún evitar su aparición.

En primer caso hablamos de los padres para realizar la función protectora de sus hijos, pero, como es bien conocido, la mayor parte de los abusos ocurren en las familias lo que coloca en disyuntiva (aunque no debiera de serlo) la manera más idónea de responder ante la demanda del niño, esperándose fuese de confianza, amor y actuar legalmente sobre dicho delito. En caso de no presentarse de esta forma utópica, ¿qué es lo que procede? Siguiendo en los pasos de lógicos de nuestra indiscutible realidad, lo que ocurriría sería NADA.

Citando a Martin Luther King “No me aterra la maldad de los malos sino la indiferencia de los buenos” .Ahora bien, refiriendo a la responsabilidad de la sociedad ante el conocimiento de que se está cometiendo un delito y no mover un dedo para posicionarse en la fila de hacer justicia y brindarle una mejor o al menos una situación de vida más tranquila a la víctima. Que no son los “buenos” quienes no realizan actos delictivos, sino los que actúan al ver que sucede, muy a pesar de que la víctima tenga algún parentesco con él o sea hijo o hija de alguien importante en la comunidad se debe hacer lo correcto.

No nos preguntemos después, el porqué de la existencia de tanta delincuencia en nuestro entorno, ni los engaños, ni los secuestros. Todo es consecuencia de una sociedad indiferente e individualista que pretende el bienestar únicamente propio y el de su familia que pudiendo ver más allá no se preocupó y si antes teníamos al niño maltratado de la vecina, ahora tendremos el secuestrador de nuestro hijo.

Como suplica especial, y hablando por todas las víctimas que gritan por dentro, no nos convirtamos como sociedad en el padre ausente, en el padre egoísta, en el padre castigador, en el padre ciego, o peor aún, en el mal de la sociedad actual, el padre indiferente, quien está, conoce, pero no actúa, no le importa simplemente porque no es él a quien le ocurre.

Seamos una sociedad que se empatiza, que es sensible a las situación pero que esa sensibilidad le da fuerzas para denunciar, proteger y amar a quienes nos necesita. Retomemos esa función protectora unos con otros, seamos amables, accesibles, confiables y que confían, devolvámonos el sustantivo de SERES HUMANOS que parece nos aferramos a borrar.

Recolectemos información, hagámosla accesible, hablemos sin miedo, cuidemos y protejamos a los niños sean nuestros o no. Actuemos, la mejor prevención es el amor, el cuidado, la confianza, la comunicación. El peligro existirá, pero hagámosle saber a nuestros niños que existe un lugar seguro para ellos, que serán atendidos, valorados y escuchados. Pongámonos en su situación por un segundo y comprenderemos que es lo que necesita de nosotros y si está en nuestras manos hacerlo démosle esa oportunidad de sentirse protegido por el adulto como lo indica el curso natural de la vida.

Despertar conciencias y actuar, es una de las funciones que cumple este blog, a quien agradezco, principalmente a su creador al ser una de las personas enfocadas en la meta, ASI nunca más. La calidad del ser humano detrás de las miles de visitas para la recolección de la información, nos da un ejemplo de la sociedad organizada que necesitamos con una lucha y un objetivo que poco a poco podrá cumplirse, y al conocer la noticia de que somos más nos da el aliento necesario para seguir en el camino. No nos equivocamos, juntos como ciudadanos responsables podemos ser ese padre y ese ejemplo a seguir que todo niño necesita. Creemos como sociedad mejores seres humanos para lograr de este mundo un lugar seguro y pleno para todos.


Por: María Fernanda Coronado Noreña
Grupo Freedom
Asociación de Psicología Humanista Tampico, Tamaulipas.