martes, 7 de agosto de 2012

RECORDANDO EL ABUSO SEXUAL. LO OLVIDASTE PARA PODER SOBREVIVIR

La experiencia más horrible que se puede vivir de niña/o

Uno de los mecanismos más efectivos que los niños utilizan para manejar los abusos sexuales ¿Cómo puedo saber si fui abusado de niña/niño? es olvidar el abuso. Algunos sobrevivientes al abuso siempre lo han recordado, pero muchos adultos olvidaron la experiencia. Entonces 20, 30 o 40 años más tarde, algo sucede y de pronto empiezan a recordar. 


Se levanta un día y dice “yo fui abusado sexualmente”. Empieza a verimágenes de su padrastro entrando en su cuarto por la noche, o tiene sueños vívidos de su hermano encima de él/ella. Cuando por años se haolvidado del abuso, es muy fácil ignorar estos recuerdos-¿Dé dónde vienen? ¿Qué es lo que significan? ¿Cuándo se detendrán?- o empieza a preguntarse si se está volviendo loco/loca. Pero bloquear el abuso, y recordarlo después, es una herramienta de sobrevivencia que tiene sentido.


Cuando eras joven, no hubieras podido recordar lo que te había sucedido. Siendo un niño de 8 años no podrías haberte sentado a la mesa con tu padrastro desayunando el cereal  primera hora de la mañana, si hubieras recordado lo que sucedió la noche anterior. Lo olvidaste para poder sobrevivir.

Una de 4 niñas, uno de 6 niños son abusados antes de los 18 años sin contar los que callan diariamente
Una vez reprimido lo que sucedió, empiezan a surgir los recuerdos. Las transiciones de la vida-nacimiento, compromiso en una relación, la muerte de un padre, jubilación, menopausia, vejez, divorcio, cualquier tipo de pérdida- con frecuencia estimulan la aparición del abuso sexual. Un tratamiento médico-una visita al dentista, un examen con el ginecólogo o urólogo, operación o cualquier procedimiento intrusivo médico- podría desenterrar imágenes o sentimientos enterrados. Experiencias en la adultez que te sitúan de víctima, como un robo, asalto, violación estimulan la aparición de recuerdos de un abuso temprano. 

Algunas veces los mismos padres recuerdan su propio abuso cuando su hijo es abusado, o cuando ese niño alcanza la edad de cuando ellos mismos fueron abusados de pequeños. Los sobrevivientes lo recuerdan al hacer el amor, al ejercitarse, o durante los masajes. O cuando ven un show en la televisión, escuchan la historia de un amigo, o leen un artículo como el que estoy escribiendo.

Si usted siempre ha recordado el abuso, los recuerdos que siente más bien son en forma de sensaciones  en lugar de situaciones específicas. Con mucha frecuencia los sobrevivientes pueden contar con detalle lo que ocurrió como si fuera una lista de víveres, pero están bien desconectados de la forma en que realmente sintieron el abuso. En esos casos, recordar involucra reconectarse con esos sentimientos.

Recordar es un proceso continuo de descubrimiento. Conlleva ir hacia atrás, y excavar los años tempranos de tu vida-poner las piezas en su lugar y reinterpretar las cosas que ya sabes, comenzando a reconectar las sensaciones con las imágenes que siempre has tenido, experimentando sensaciones en el cuerpo desconocidas. A veces  podrías experimentar un recuerdo en el revives aspectos del abuso, o reexperimentas los sentimientos que viviste en aquél momento- terror, dolor físico extremo, un tremendo aislamiento. Estas experiencias pueden ser horribles y sumamente perturbadoras. Podrías responder con shock, horror, o con incredulidad. Podrías sentir pánico o ideas suicidas, o sentirte sumamente aliviada de saber por fin la verdad de tu vida.

Voy a seguir escribiendo ejercicios para que los realicen con su terapeuta o profesional de la salud mental. Recuerden que existen personas donde pueden acudir o llamar por teléfono en caso de que sientan pánico.

COSAS QUE PUEDEN HACER SI SE SIENTEN AGOBIADAS
La próxima vez que te empieces a sentir agobiada/o, observa este apartado y empieza a realizar cualquier cosa que hayas escrito. Si las hicistes todas empiézalas hacer nuevamente. Pide ayuda. Después respira profundamente. Las sensaciones pasarán.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esto me ha dejado frio. Es precisamente lo que estoy viviendo, he recordado cosas, pero no todo y me he sentido muy mal. Llegar a mis 26 y tener que aceptar lo que me paso, no ha sido fácil