El pasado miércoles, la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, dando un nuevo y gran paso, aprobó el proyecto de ley introduciendo una fórmula para dar acceso a la justicia a víctimas que no pudieron tenerlo en el pasado. Fue impresionante y reparador observar como lo que ayer parecía imposible, es hoy en las conciencias de muchos -autoridades, parlamentarios y ciudadanos- un imperativo ético que empapa este proyecto de un espíritu transversal y genera un clima en el que la justicia debe primar por sobre las dificultades que nos presenta a veces el derecho.
Valoramos el esfuerzo valiente del Congreso por tratar de incluir a todas las víctimas. Agradecemos el trabajo del gobierno que desde el día uno, puso alas firmes a este proyecto para lograr lo que hoy es una realidad indiscutible y que no debe ser sacada nunca de foco: los delitos sexuales contra menores de edad no prescribirán y esto es ya un consenso y una gran evolución de cuidado y justicia. Pase lo que pase en lo que resta de discusión, y para el descanso de quienes históricamente hemos seguido el caminar de esta ley, este es un principio que podemos decir hoy con toda seguridad, será ley de la República. Solo nos queda esperar que la tramitación concluya con la urgencia que amerita. Porque cuando se trata de abusos sexuales contra niños, cada día cuenta.
Vinka Jackson
Josefina Mora
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